Una vez finalizado el nacimiento del bebé, inicia el periodo llamado puerperio, que dura entre 6 y 8 semanas. Durante este tiempo, el cuerpo de la madre comienza a recuperar su estado previo al embarazo. Sin embargo, no se trata solo de cambios físicos: el puerperio implica también ajustes emocionales, energéticos y sociales.
En este artículo te comparto sugerencias prácticas para acompañarte en esta etapa de recuperación, con foco en el descanso, la alimentación, la actividad física y el apoyo familiar.
💤 Sobre el descanso
Los primeros días y semanas suelen estar marcados por el cansancio, el desvelo y la adaptación al ritmo del bebé. Por eso, el descanso no debe ser un lujo, sino una prioridad.
Consejos para descansar mejor:
- Acepta ayuda: para bañar al bebé, alimentarlo o dormirlo. No tienes que hacerlo todo tú sola.
- Duerme cuando el bebé duerme: aunque sean pequeñas siestas, aprovecha cada momento.
- Coloca la cuna cerca de tu cama: facilitará las tomas nocturnas sin interrumpir tanto tu sueño.
- Permite que otra persona alimente al bebé: si puedes extraer leche materna y darle un biberón ocasional, el padre u otro cuidador podrá ayudarte mientras tú descansas.
- Camina unos minutos al día: el aire fresco y la luz natural también favorecen el descanso nocturno.
🍽️ Sobre la nutrición
Durante el posparto, el cuerpo necesita reponerse y nutrirse. Sumado a la lactancia materna (que demanda mucha energía), una alimentación balanceada es fundamental para tu bienestar físico y emocional.
Consejos prácticos:
- No hagas dietas para perder peso. Tu cuerpo necesita calorías de calidad. La lactancia ya ayuda de forma natural a equilibrar tu peso.
- Planifica un menú sencillo y nutritivo para la semana, con todos los grupos alimenticios.
- Come alimentos frescos y fáciles de preparar. Puedes dejar comidas listas o pedir ayuda para cocinar.
- Organiza y delega tareas como las compras o la preparación de comidas.
- Mantente bien hidratada. El agua es esencial para la producción de leche y tu energía diaria.
🧘♀️ Sobre la actividad física
El cuerpo necesita reposo, pero también movimiento consciente y progresivo para recuperarse. El suelo pélvico y los músculos abdominales han pasado por un gran esfuerzo y deben fortalecerse poco a poco.
¿Cuándo comenzar?
Durante las primeras 6 a 8 semanas se recomienda reposo activo. Luego, si tu recuperación va bien (y según si fue parto vaginal o cesárea), puedes comenzar ejercicios suaves.
Beneficios del ejercicio en el posparto:
- Mejora la circulación y salud cardiovascular
- Favorece la recuperación del suelo pélvico
- Ayuda a evitar pérdidas de orina
- Favorece la pérdida de peso de forma saludable
- Disminuye molestias de espalda y piernas
- Aumenta la energía
- Mejora el sueño
- Reduce el estrés y previene la depresión posparto
Recomendaciones antes de iniciar:
- Consulta con tu ginecóloga(o) antes de empezar cualquier rutina.
- Si es posible, acude a una fisioterapeuta especializada en posparto para guiarte en los ejercicios.
- Comienza con rutinas suaves, sin exigirte demasiado.
- Hidrátate antes, durante y después del ejercicio.
- Usa un sujetador cómodo para proteger tus senos y, si lo deseas, una faja para mayor soporte.
👨👩👧 Apoyo familiar y social
Tener un bebé demanda tiempo, energía y adaptación. Esto puede generar tensiones, sobre todo en madres primerizas y parejas sin experiencia previa.
¿Cómo lograr un entorno más equilibrado?
- Pide ayuda a familiares o amistades de confianza, especialmente para tareas domésticas como lavar ropa, cocinar o limpiar.
- Contrata apoyo externo si está dentro de tus posibilidades.
- Distribuye responsabilidades con tu pareja o acompañante en el cuidado del bebé.
- Organízate por turnos, para que ambos puedan descansar y tener momentos personales.
- Mantén espacios de comunicación emocional: expresar cómo te sientes es clave para fortalecer los vínculos.
💬 Conclusión
El posparto es una etapa natural pero exigente. Requiere escucha, paciencia y mucho autocuidado. Priorizar tu descanso, una buena alimentación, el movimiento suave y el acompañamiento afectivo marcarán una gran diferencia en cómo vives esta etapa.
No estás sola. Organizarse, apoyarse y cuidarse es parte del camino. Recuerda: cuidarte también es cuidar a tu bebé. 🌷