Te confieso algo: durante mucho tiempo me iba a dormir sin realmente “cerrar” el día. Apagaba las luces, sí, pero mi mente seguía encendida: repasando lo que no hice, anticipando lo de mañana o sintiendo el cansancio acumulado sin pausa, preparando lo del día siguiente, recordando lo mas relevante del día .Definitivamente no DORMIA!!!
Fue cuando empecé a incorporar pequeños gestos antes de dormir —con intención, no por costumbre— que noté un cambio real: dormía mejor, me sentía más tranquila, y lo más importante… me sentía cuidada por mí misma.
Una rutina nocturna consciente no es algo elaborado ni perfecto. Es una pequeña secuencia de gestos que le dicen a tu cuerpo: “el día terminó, ahora es momento de soltar”.
🌙 Importancia del autocuidado nocturno
Así como el cuerpo necesita descanso, la mente también necesita una transición. Si te duermes con tensión acumulada, pensamientos pendientes o estímulos hasta último momento, es probable que el descanso no sea realmente reparador.
Crear una rutina nocturna te ayuda a:
- Bajar el ritmo mental y emocional.
- Prepararte para un sueño más profundo y de mejor calidad.
- Despertar con más claridad y energía.
- Y sobre todo: a reconectar contigo misma al final del día.
✨ Cuidados antes de acostarse
Puedes elegir uno o dos de estos gestos y hacerlos tuyos. No se trata de hacerlos todos, sino de realizarlos con intención.
🕯️ 1. Ilumina con suavidad
Al caer la noche, disminuye la intensidad de las luces en casa. Esto favorece la producción de melatonina (la hormona del sueño). Evita las pantallas brillantes al menos 15 minutos antes de dormir.
🌿 2. Prepara una infusión calmante
Disfruta de una taza de té de manzanilla, tilo o lavanda. No se trata solo de la bebida: el ritual de prepararla y tomarla con calma ya forma parte del descanso.
📖 3. Cierra el día con gratitud o descarga emocional
Escribe tres cosas por las que agradeces o aquello que necesitas soltar. Incluso si tuviste un día difícil, reconocerlo y escribirlo puede ayudarte a liberarte. Puedes usar una libreta junto a tu cama.
🧴 4. Cuida tu cuerpo con cariño
Aplica una crema de aroma suave o hazte un masaje en los pies. Convierte este gesto en un momento de contacto amable contigo misma(o).
🍽️ 5. Cena ligera
Procura que tu última comida del día sea liviana y fácil de digerir. Esto favorece un sueño más reparador.
💨 6. Respiración o visualización antes de dormir
Recuéstate y respira profundamente. Visualiza cómo, con cada exhalación, sueltas el peso del día. Puedes imaginar una luz suave envolviéndote o un lugar que te transmita paz.
💧 7. Toma un vaso con agua antes de dormir
Hidratarte antes de acostarte puede contribuir a mejorar la circulación y mantener el equilibrio del cuerpo durante la noche.
🌌 Dormir no es solo cerrar los ojos: es entregarte al descanso consciente
Y para lograrlo, primero necesitas hacer espacio para ti. Una rutina de noche saludable, no solo mejora tu descanso, también te recuerda que mereces terminar el día cuidándote.
Cuidar empieza por ti, aplicando hábitos para un sueño reparador te ayuda a cerrar el día con calma, mejorar el descanso, hacer conexión cuerpo-mente y cuidar mejor de quienes te rodean.
¿Qué gesto podrías incorporar esta noche para regalarte un cierre más amable?
Te leo en los comentarios 💬